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Arquitectos: Atelier Deshaus
- Área: 7000 m²
- Año: 2025
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Fotografías:Fangfang Tian

Descripción enviada por el equipo del proyecto. Situado en la localidad de Xilong en el condado de Anji, provincia de Zhejiang—una zona reconocida como una de las principales regiones productoras de té blanco en China—el proyecto ocupa un terreno previamente sin uso en el borde de los campos de té cerca del centro del pueblo. Originalmente, el sitio estaba destinado a la construcción de un Museo del Té Blanco, así como a un museo para el cercano sitio arqueológico paleolítico de Shangmakan. En respuesta, el edificio fue concebido como dos conjuntos basados en patios que se extienden entre los campos de té y un estanque natural, con techos verdes diseñados para fusionar la arquitectura sin problemas con el paisaje agrícola circundante.



Tras su finalización, el edificio experimentó un cambio en su programa—o más bien, la idea de un museo de productos agrícolas rurales evolucionó hacia un nuevo modelo que enfatiza la participación y el compromiso. El té blanco sigue siendo el tema central del proyecto, pero su papel ha sido redefinido—de exhibición pasiva a promoción activa y reinterpretación creativa. Al mismo tiempo, la entidad operadora imaginó el sitio como un nuevo tipo de centro creativo, uno que atraería a los jóvenes lejos de la congestionada ciudad y hacia el campo. El objetivo era ofrecer un nuevo modelo de trabajo remoto y vida rural para viajeros, nómadas digitales y otros usuarios contemporáneos.


La distribución de ACDC se beneficia de la estrategia arquitectónica original de distribución espacial flexible. Salas de exhibición de varios tamaños se dispersan a través del terreno ondulado y están conectadas por pasarelas cubiertas. Este enfoque permite que los conjuntos dispersos pero conectados de salas de exhibición, espacios de trabajo, espacios educativos, áreas comerciales y salones de té sirvan múltiples propósitos: acomodar diversas formas de trabajo creativo, atender a diferentes grupos de usuarios y apoyar una variedad de eventos culturales temáticos a través de programas tanto independientes como compartidos.

Los ondulantes campos de té de Anji representan una abstracción hecha por el hombre de la topografía natural—un tipo único de paisaje cultivado formado por el ritmo de la plantación de té. La arquitectura adopta una estrategia similar. En planta, sigue una cuadrícula ortogonal que recuerda una extensión urbana; sin embargo, en sección, refleja y amplifica las ondulaciones naturales del sitio. Este gesto dual no solo satisface las necesidades funcionales del edificio, sino que también resuena con el orden oculto del terreno original, convirtiéndose en una re-formación del paisaje mismo. Junto con los campos de té serpenteantes, la arquitectura ayuda a generar un nuevo paisaje híbrido en esta tierra.

Este paisaje no es meramente visual. Si bien el diseño emplea una tipología tradicional de patio y corredor, también convierte los patios en topografías transitables. Ya sea que el centro esté abierto o cerrado, los visitantes pueden deambular libremente por las superficies superiores de los patios y corredores, experimentando la arquitectura como si se movieran a través de los propios campos.
